domingo, 11 de noviembre de 2012

Va de progre



Y las siete trompetas soplarán un dulce rock'n'roll
fuertemente, dentro de tu alma...
En sangre escribe la letra de la marca de una nueva melodía.
Genesis

A finales de los 80 y principios de los 90 tuve un leve contacto con la música progresiva, pero no estaba preparado para ello (¿demasiada juventud?). Mi encuentro real se produce hace pocos años y gracias al metal progresivo, que cada vez me iba poniendo más afilados los dientes. Comprendí rápidamente que esto era algo más que acordes en quintas distorsionadas. Esto era mucho más, algo que transgredía la estructura básica de la canción basada en estrofa y estribillo. Quedé atrapado.



Mi ignorancia sobre el género era (y aún lo es) amplia, mi conocimiento llegaba solo hasta unos cuantos éxitos y clásicos de los 70 y 80: The logical song de Supertramp, Another brick in the wall de Pink Floyd, Owner of a lonely heart de Yes o Heat of the moment de Asia. Sin duda grandes canciones, aunque quizás menos progresivas. Pero cierta madurez hace que nos sintamos curiosos y ahondemos más en los asuntos.

La explosión de esta música surge en un ambiente marcado por el espíritu del mayo del 68 y con el rock psicodélico como antecedente. La experimentación, la improvisación y la ingesta de drogas alucinógenas por parte de músicos de gran nivel, inspirados por otras artes como la literatura, la pintura o el cine, provocan una sonoridad peculiar producto de la combinación de elementos de la música docta con otros tomados del jazz, del rock u otras músicas del mundo. Mi curiosidad aumentaba por momentos.

Cuando este género tiende a ser más orquestal o polifónico se le llama también sinfónico. Pero ya desde sus inicios fue muy difícil separar o etiquetar bandas que se nos antojan de un mismo estilo: Pink FloydMike OldfieldThe Alan Parsons Project, King CrimsonJethro TullGenesisEmerson, Lake and PalmerCamelYes o Marillion.

El mellotrón es un instrumento que parece haber surgido al servicio de este género musical. Bandas como King Crimson, Genesis o los españoles Triana lo usaron magistralmente en sus composiciones. Sin embargo, es el Hammond el que con el tiempo fue más utilizado y el que nos ha dejado para siempre su peculiar sonido en bandas como Deep Purple en las manos del gran, y recientemente desaparecido, Jon Lord.


Las portadas de los vinilos son obras de arte, acordes con las letras de las canciones que se apartaban de la temática habitual del rock y que incluían reflexiones filosóficas o referencias a mundos fantásticos. Los discos conceptuales parecían ser la horma del zapato para desarrollar todo este universo temático y progresar armónicamente: The Lamb Lies Down On Broadway de Genesis, The Wall de Pink Floyd, Tommy de The Who, 2112 de Rush o Thick as a brick de Jethro Tull.












Crisis? What Crisis? Algunos críticos de los 80 pusieron el progresivo en la sepultura, pero a la sombra alargada que supuso The wall de Pink Floyd se le sumó el nacimiento de una banda que salva la década y pone las cosas en su sitio: Marillion. Bandas de otras variantes musicales como Radiohead se dejaron seducir y bebieron también de estas fuentes durante esta década.

En los 90 el género se encuentra con un resurgimiento impulsado por la fundación Swedish Art Rock Society, cuya misión era rescatar los valores del rock progresivo clásico. Spock´s Beard y Transatlantic con Neal Morse a la cabeza, The Flower Kings con Roine Stolt o los Porcupine Tree de Steven Wilson se muestran como herederos directos de la escena setentera.


Y como no podía ser de otra forma, muchas bandas de metal incorporan la esencia progresiva a sus composiciones. Esta década es suya. Una vez más demuestran que su música es abierta y supone siempre un perfecto canal que adapta cualquier cauce musical a su estilo. Surge así el metal progresivo y sus variantes: Queensrÿche, Dream Theater (adoradores de Rush y el grupo con más relevancia de los últimos 25 años), Symphony X, Fates Warning, Pain of Salvation, The Jelly Jam, Liquid Tension Experiment, OSI o los asombrosos e inclasificables Tool.


En la primera década del siglo XXI parece haber una revitalización del género comandada por los nuevos trabajos de grupos clásicos como Marillion, Asia, Yes o Rush, así como las constantes colaboraciones de algunos iconos del género en bandas que han ido surgiendo en estos años. Grupos de proyección más amplia como Muse se han dejado cautivar en estos últimos años por la inspiración progresiva y han llegado a soltarse la melena de una forma muy descarada.

Transatlantic, al igual que Asia en su momento, es un supergrupo formado por miembros destacados de otras laureadas bandas:
Neal Morse: voz principal, teclados, guitarra (Spock´s Beard)
Mike Portnoy: batería, coros (Dream Theater, OSI, Liquid Tension Experiment...)
Roine Stolt: guitarra, coros (The Flower Kings)
Pete Trewavas: bajo, coros (Marillion)
Daniel Gildenlöw: guitarra, coros, teclados (Pain of Salvation)


Afortunadamente, y gracias en parte al mundo globalizado, España no ha sido ajena a este devenir musical, como antaño, ni ha hecho oídos sordos. Aparecen sobre el escenario fantásticos grupos como Exxasens, Morgana vs. Morgana, Jardin de la Croix… o Toundra, que como otras bandas ofrece sus creaciones de forma gratuita o a un precio voluntario en Aloud Music y, sin embargo, consiguen vender más que nadie en el mundillo discográfico independiente y ganarse un reconocimiento dentro y fuera de nuestras fronteras (Francia, Rusia o Alemania). Su último disco es una gozada instrumental.

Al margen de las bandas y discos clásicos de los 70 y 80 (muy muy recomendados) que pueden encontrar en cualquier listado de la red, aportamos una pequeña muestra de recomendaciones (sin ningún orden concreto) de lo que ha sonado, y sigue sonando, por las latitudes de nuestro reproductor:

Shall we descend de The Jelly Jam
Deadwing de Porcupine Tree
Judgment de Anathema
Metropolis Pt.2: Scenes From a Memory de Dream Theater
Gordian Knot de Gordian Knot
Liquid Tension Experiment de Liquid Tension Experiment
III de Toundra
Flying Colors de Flying Colors
The Whirlwind de Transatlantic
Themata de Karnivool
Aenima de Tool
Free de OSI
III. De lo inevitable de Morgana vs. Morgana
Insider de Amplifier
Sola Scriptura de Neal Morse

El Día del Rock Progresivo se festeja el 21 de septiembre el mismo día que se celebra el Día Mundial de la enfermedad de Alzheimer. ¿Será una coincidencia o es que el destino quiere decirnos que no debe ser olvidado, que se trata de un género musical atemporal que no entiende de modas?




5 comentarios:

  1. Ya me mataste con el Progresivo. Pero de Tool no paso

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  2. Qué bien y curradita está la entrada. Lleva un rato leerla y ver todos los enlaces, pero merece la pena. A mí me ha hecho creer que soy "muy progre", jeje. Nada mas lejos de la realidad, pero con esa selección, ¡fácil caer en el error! Mucho he aprendido en los útimos años sobre este estilo... ¡Gracias, maestros! Siento mucho que a pesar de eso esté muy lejos de alcanzar un "Aceptable".

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    1. Pero ,¿a que conocemos más de lo que creemos y desconocemos otro tanto? Un universo lleno de maravillas.

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  3. A ver David, te recomiendo que escuches algo de lo que hay recomendado para que luego, como yo, te lleves sorpresas positivas. Ya te estoy viendo tararear alguna melodía un viernes por la noche en Los Parados, ojos cerrados incluido.

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  4. Pero Yeg ,¿a que conocemos más de lo que creemos y desconocemos otro tanto? Un universo lleno de maravillas.

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